Durante toda su adolescencia, el príncipe paladín es entrenado en las artes de Altalión; el combate con la espada larga, las artes de la curación, el gobierno y la administración; el sentido de la estricta justicia, el valor, el perdón y la empatía. También se les enseñan las artes del amor carnal, pero solo en teoría; solo tendrá una oportunidad para practicar.
Al llegar a cierto momento, el príncipe paladín elige a una mujer que lo acompañará durante el resto de sus días; mientras dura su extenso noviazgo, al príncipe se le está vetado consumar el coito con su futura esposa (aunque rumorean que otras formas de placer les están permitidos). En cierta fecha imprevisible, el rey anuncia el matrimonio del príncipe (que bajo ciertas circunstancias puede ser él mismo). El día del matrimonio del príncipe es llamado el Día de Plata, o Día de la Luna, o Día de los Esponsales, según que tan culto o arrogante es el interlocutor. Desde el amanecer de ese día hasta el atardecer, suaves y tranquilas festividades se dan en toda la ciudad; mientras tanto, el castillo del Rey se desaloja completamente, dejando dentro solo al príncipe y a su prometida, que desde esa noche será su Esposa (o Esposo, porque ha habido algunas Reinas Paladín). Solo en está ocasión el Príncipe podrá tomar a su mujer y compartir el tálamo; sin embargo, la tradición proclama que ambos mantienen un lento acto sexual que dura hasta el atardecer. Nunca sucedió que la mujer del Príncipe no quede encinta en esa oportunidad. Esta es la razón por la cual los Reyes Paladines no tienen hermanos. Mientras tanto, el Rey paladín participa de las celebraciones en las calles, acompañado de su esposa y madre del príncipe.
Me han confiado algunas suplicantes de Farakal que ciertos objetos mágicos son más potentes si se hechizan en la ciudad durante el Día de Plata; pero dado que este día se produce de manera poco pronosticable y una vez cada veinte o veinticinco años, no es realmente un consejo productivo para el artífice aficionado.
---Extraido del cuaderno de viajes de Eidan, sirviente de la palma
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