miércoles, octubre 12, 2005

Parte 1: el reencuentro

Juan Pablo dio tres amplias pinceladas en el lienzo que tenia enfrente y se recostó en su cómodo sillón de gamuza que, junto a una vieja cama victoriana y un armario color de roble, era el único mobiliario que ocupaban el modesto espacio de su austero apartamento en Groenlandia. A través de la ventana veía caer los copos de nieve que desde hacia 3 meses cubrían las calles de Godthåb. Juan Pablo tenia una carrera bastante exitosa como artista, pero como era bastante tacaño, había elegido un modo de vida mas bien ascético.
Estaba mas loco que de costumbre. Un par de años después de haber leído una historia bastante cómica en el blogspot de Kraad, donde su viejo amigo Kiwi lo convertía en protagonista de una descabellada aventura, el “joven Elfo” había decidido mover su base de operaciones a las heladas tierras del hemisferio norte, confiando que con el tiempo y meditando religiosamente para entrar en comunión con los muertos, la realidad se pondría a su favor y cumpliría finalmente su tan anhelado deseo de ir a Kraad. Lo que no esperaba, ciertamente, era que de hecho, algo extraño estaba apunto de acontecer esa helada noche del 1º de diciembre de 2012.
Mientras Juan Pablo apuraba un trago de wisky por el gaznate, tocaron a la puerta. Se detuvo en seco, pues no esperaba a nadie y le pareció muy extraño recibir visitas a altas horas de la noche; en especial porque no tenia amigos ni conocidos en Groenlandia. Se levanto de su sillón y con paso vacilante se acerco a la puerta, no sin antes armarse con su vieja “chien” para defenderse en caso de que fueran ladrones. Mas, grande fue su sorpresa cuando reconoció la voz que lo llamaba del otro lado de la puerta, “una presencia que no sentía desde...”
-Dale, elfo estúpido- grito Lisandro- que nos tamos cagando de friOOOO!!!!
El artista abrió apresuradamente la puerta y su corazón se colmo de una infinita alegría. Allí estaban todos sus amigos: Lisandro, por supuesto, Kiwi, el Ojo, Joaquín y el Checho. Habían pasado muchos años desde la ultima vez que se vieran y no pudieron mantenerse en contacto pues desde la 3º guerra mundial en 2008, la internet se había caído y cuando trataron de reestablecerla, todas las casillas de correo se habían borrado (aparte que también se hicieron aca todos los satélites de comunicación... mencione que el mundo estaba al borde del caos y que había cielos rojos? ¿no? Sorry).
Los años habían sido bastante clementes con todos, salvo el Ojo que ostentaba mas canas que de costumbre y aparentaba estar en su estado definitivo de amargura. Pero todos parecían bastante animados. “La compañía finalmente se ha reunido” pensó Juan Pablo para sus adentros.
-Pasen, che- dijo el Elfo tratando de contener la emoción- Que pingo hacen ACA??!!!
-Ya te vamos a explicar.
- dijo el Kiwi mientras lo abrazaba- Que hace culiao?!
Luego de abrazarse y saludarse emocionadamente con todos, el Elfo los invito a sentarse donde pudieran. La cama tenia bastante espacio y tres podían sentarse sin mucho problema en el sillón. Juan Pablo se disculpo pues no tenia mucho para convidarles, pero el Checho abrió una enorme valija donde había traído muchos porrones, papitas y “ganja”. Esa sería una noche para recordar.
Mientras festejaban el reencuentro, el pintor se actualizo sobre la vida de sus viejos compañeros de aventuras. Lisandro, su viejo DM, luego de la 3º guerra, había creado un nuevo SO, Altemit, que había restaurado pocos años antes el viejo sistema planetario de comunicaciones. De esta forma, se apoderó del monopolio de Bill Gates y así se convirtió en el hombre mas rico del planeta (por supuesto, el había bancado a todos el viaje a Groenlandia en un inusitado ataque de ultra generosidad). El Ojo no había tenido tanta suerte. Luego de muchos años creyendo que sus días terminarían vinagrosos y solitarios, se reencontró con una vieja conocida: Catalina. Después de unas 3 o 5 citas, se enamoraron y se casaron. “Con razón las canas verdes y la cara de vinagre” pensó Juan Pablo y contuvo con dificultad una sarcástica carcajada.
El Checho tenia un laburo muy prospero como psicólogo... de mascotas!!! Durante un tiempo pareció que había superado la perdida de la simpática cachorrita que le regalara el Perro Ramos. Cuando cumplió los 26 años, comenzó a trabajar sobre una tesis de postgrado que le hubiera garantizado un premio Nóbel: intento comprender la mente femenina. Esta, lamentablemente, era una tarea titánica que ni siquiera el pudo alcanzar. Se volvió loco y durante un año y medio estuvo internado en un hospicio. Cuando salió, descubrió que podía comunicarse empaticamente con las mascotas. Esta habilidad la había obtenido de los pocos logros de su investigación combinados con su locura, el recuerdo latente de la cachorrita Tanga... y de los poderes mentales que había recibido cuando le cayo un rayo en su estadía en el asilo para locos (¡¿?!!!). Con el tiempo, aprendió a dominar sus habilidades y así fue que puso su consultorio para tratar animales abusados y perturbados mentalmente. Todo un éxito.
Joaquín había seguido dando muchas vueltas con la Mariel, sin llegar nunca a una relación estable. Llego incluso a probar con otras mujeres. De pronto, un día, comprendió que lo que tanto había buscado estaba en el jardín de su hogar. Durante una jornada de carnaval, volviendo a su acogedor hogar (que ahora contaba con tres pisos mas, ascensor, helipuerto y pista de baile donde Mocman realizaba sus tan famosas “orgías”) encontró su antiguo amor, Gabriela, esperándolo en el patio (y yo que dije?). Después de charlar durante 2 horas, decidieron casarse. La fiesta fue muy emotiva y todos fueron invitados disfrutar del pantagruesco banquete que se realizo una cálida noche de verano. Al mes siguiente, Joaquín y la Gaby se divorciaron (esta vez para siempre). Destruido por su fracaso amoroso, Moc se mudo a Buenos Aires donde intento jugar en un club de la B. Pero, ante la falta de sangre que ponía en los partidos, los dirigentes lo descartaron. Así fue que se encontró con Lisandro (que justo lo estaba buscando) y llego junto con el grupo a Groenlandia.
Finalmente, el Kiwi se había convertido en un gran director de cine. Pero, luego de ganar el oscar a mejor película extranjera, se volvió loco y le declaro la guerra a Hollywood. Durante 40 días y 50 noches, el soleado estado de California se baño con la sangre de los miles de actores, directores, productores, etc. de una industria en decadencia que había perdido todo rastro de imaginación y se dedicaba a hacer remakes y secuelas únicamente (“Terminator 7: la venganza de Edward Furlong” había estado durante dos meses en cartel sin bajar la taquilla, hecho que compondría uno de los catalizadores de la locura del Ovejero). Cuando hubo ganado la guerra, Kiwi, alentado por su hermana Verito quien era su general, de paso luchó contra las fuerzas armadas norteamericanas. Si bien no ganó el enfrentamiento, su abnegada pasión por la lucha brindo un excepcional ejemplo a los demás países. Este fue, por lo tanto, el origen de la 3º guerra mundial (aha, uds. creían que el causante era Bush o Bin Laden? Tontos!!!).
Cuando la charla termino y la cerveza se acabo, un profundo silencio invadió la habitación. Reinaba en el lugar una calidez armoniosa que rechazaba con fuerza al cruento invierno norteño que intentaba colarse por la ventana. Antes de que Juan Pablo pudiera preguntar nada, Lisandro se levantó y lo intercepto con una mirada profunda e irreconocible; la mirada de alguien que ha vista el abismo y este le ha devuelto la mirada. Todos los amigos se paralizaron de pronto y se prepararon para escuchar lo que el Master tenia para decirles. Entonces Lis abrió su valija, de donde saco un pequeño ventilador de mano, lo encendió y dijo:
-Elfo (voz de Lisandro haciendo de Telferas) la razón por la que hemos venido aquí es para revelarte una verdad que podría destruir al mundo, pero que será dicha solamente aquí, esta noche, para nuestros oídos: una portal a Kraad se abrirá la medianoche del 26 de diciembre. Lo que el Kiwi predijo era cierto.
Juan Pablo observo a Lisandro estupefacto, sin poder comprender la emoción que crecía en su interior. Luego de posar su mirada incrédula en el rostro sonriente de sus amigos, volvió a mirar al DM y en un suave murmullo, articulo la única palabra que se le ocurrió- Guot?
-Eso no es todo- replico Lisandro- sabemos donde sucederá. El evento ocurrirá a los pies del Hombre Largo en Wilmington, Sussex. En Inglaterra.
Durante unos segundos hubo un silencio mortecino. Entonces el elfo volvió a hablar –Guot? Lo mas obvio hubiera sido que digas Stonehenge, y sin embargo esto no deja de ser obvio. E un plagio a Neil Gaiman!!!!

Next: chapter 2 and finale

3 comentarios:

Sibling dijo...

HAHAHAHAHAHAHA!!! Esto está muy bueno, Valdarien, lo mejor que se ha posteado, junto con las historias locas de Lis. Apurate con la continuación.

Mandramas dijo...

Excelente. Da para escribir una secuela cuando tenga tiempo. A pedido de kiwi, le corregí los problemas de cortar-y-pegar-n-veces e intercale dos otres substantivos.

Anónimo dijo...

Si, (tono adulto) esta bueno nada mas. jajajaja.